miércoles, 27 de agosto de 2008

La sinfonía de las Urracas.


Las realidades subterráneas se ríen hipócritamente a carcajadas mientras explotan en cada calle, las metáforas escasas como las palabras se suspenden entre las sinfonías de cualquier voz. Un miércoles mas, en el que las miradas agonizan entre silencios, en el que la incomodidad solo inspira a escapar.

Llueve, llueve a cantaros… todos tienen miedo, todos aquí temen por los pasos en falso de los demás sin ahondar en sus múltiples desgracias, en su miserable existencia.
Las sensaciones disminuyen considerablemente, estoy cansada, esta mortalidad, esta rutina… esto no es lo mío, pero estoy aquí sin poder hacer nada por el momento, de manos atadas a un escritorio, rindiendo cuentas a quien me amarga la mañana, soportando la ignorancia y la falsedad, esperando que alguien abra los ojos y dispare verdades que aclaren tantas tragicomedias insanas.

No soporto esta inútil convivencia, este vómito de ridiculez que se instala en cada esquina del andén, pero estoy aquí… sin poder hacer nada por el momento, esperando que se prolongue este invierno para que el verano no haga explotar la furia de lo indiscreto.

-FIN

1 comentario:

dAdAniMu dijo...

Amén! En este puto mundo estructurado y convencional, las letras nos llevan por encima de todo... usted está encima de todo eso, mongo... todas las tragicomedias de oficina son cosas mundanas... con estas letras... como querer agradar a toda esa gente que no tiene lo que usted tiene y nunca lo va a tener? Este mundo es irremediablemente estúpido, es la vida la que hace la diferencia y yo siempre se lo he dicho... la vida le tiene cosas grandes mongo... enorrrme el gusto de pasar por aquí siempre, mongo!!