sábado, 18 de octubre de 2008

El hoy de mis ayeres...

Me marcho de estas tierras injustas,
me arrastro frente a ti y no precisamente porque lo merezcas,
yo entiendo, yo entiendo, yo entiendo, yo nunca te entendí.

Cambié mil veces mi semblante esperando que eso generara alegría
pero simplemente me degeneraba, me engañaba y me cago en tu osadía,
me cago en todos esos instantes de asquerosa cobardía.

Y yo sabía que necesitaba más cariño, más verdad, menos inseguridad,
eras el arma asesina y yo te impulsaba a matar_____me_ me_ me_ me.

Tengo tanto de no plasmar, pensaba que era feliz y eso me lo impedía
pero en realidad me estaba ahogando entre flagelos y tantas sonrisas, falsas sonrisas que injustamente me dibujaban atardeceres que siempre fueron el fin de mi mundo inmundo, edificios que ocultaban tugurios, tu y tu agonía, yo y mis simulacros de vida.

Así nos amábamos, sufriendo, dándole cuerda a un maldito reloj de desconcierto,
jugando al escondite siempre y cuando no nos halláramos en ningún momento sin las ropas que nos cubrían de desearnos antes de tiempo o después de tanto tiempo, así éramos, insensibles mientras llorábamos a cantaros mirándonos partir, seres cargados de insalubridad, compartiendo una cama con destreza y conformidad…

Pero te amaba, pero te amo… pero me amabas, pero me amas.


4 comentarios:

Rup Daitsch dijo...

lo sacaste Tami...
tal vez era necesario.

es que se meten muy adentro, y uno no sabe cuando putas paso

yo sé

asi, el desangre tuyo.
ya viste el mio.


besos querida

Anónimo dijo...

Bien dicho Tamara.

Desde la distancia te vengo a saludar. Por que alguna vez tu siempre ibas, y así.Yo también vengo. Y alguna vez ya di mi nula opinión acerca de aquellos miedos, y seguro ahora todo ya es distinto, como todo va cambiando con las horas. Es así.

Cuidate siempre, Tamara.

Waltz

Skelter dijo...

Muchos abrazos desde el otro lado del clima.

Siempre tuyo.

DEARmente dijo...

Hola.

Un escrito muy fuerte; se siente un desahogo.

espero todo esté bien para vos.