miércoles, 21 de octubre de 2009

Our home.


Echo de menos nuestro hogar,
Ese sitio donde generalmente el refresco sabe a frutas,
En donde los besos saben a guarida,
En donde el techo se compone de devoción.

Echo profundamente de menos nuestra cama,
Objeto que resguarda nuestros mejores secretos,
Nuestras múltiples películas,
Nuestras risas y nuestras manos unidas
Apaciguando las rutinas.

Echo de menos nuestro hogar,
Un hogar no de cuatro paredes,
Sino de dos almas,
Un hogar donde la familia siempre ha sido de dos,
Un hogar en donde la mesa siempre está servida antes de las 9:30,
En donde me obligo a sujetar tú meñique,
Y la cena nos hace sostener las más largas conversaciones.

Echo de menos nuestro hogar,
Porque es el descanso de mis días de trabajo o estudio,
Porque es el sitio en donde no existe ni gente, ni transito,
Porque en el, siempre estás tu,
Con esa sonrisa de recibimiento,
Con tus abrazos, con tu hermosa risa,
Tus ojos color esmeralda y nuestros sueños.

Echo de menos nuestro hogar,
Simplemente porque en el,
Siempre estás tú, y yo siempre he buscado llegar.

Estamos lejos de casa,
Y por mi parte, a veces necesito regresar,
Estoy lejos de casa, ¿tu no lo estás?...


.

domingo, 18 de octubre de 2009

Letter


Se dice que las lenguas romance se introdujeron al caer el imperio romano y se supone que yo hablo una de ellas; la cuestión es que he perdido la capacidad de hablarte con mi dizque lengua romance, ya no sé que decirte, ya no sé como enamorarte, solamente sé que te amo, te amo en esos momentos en los que intempestivamente tu nombre, tu risa y tus ojos irrumpen en mi pensamiento.
Deseo que apaguemos las luces, hemos vivido tanto tiempo con los faros alumbrando nuestro amor, que hemos olvidado la belleza de mis manos rodeando tu espalda en la oscuridad, hemos vivido bajo una lupa que no nos permite emocionarnos sin tener que limitarnos y yo te extraño sabes, con todos tus defectos yo te extraño.

lunes, 5 de octubre de 2009

Letter...


Los instantes nos buscan por mucho tiempo; y no hacemos más que responderles con desgano y sin necesidad, es de pronto cuando saboreamos la irónica realidad, y buscamos a cada uno de esos instantes, sin que se dejen encontrar.
Le he huido incontables veces a la felicidad, simplemente porque se me hacía mas sencillo desconfiar e ignorar tanta belleza, lo tuve todo, lo recibí, pero siempre tuve dentro de mi esa desgastante sincronía entre el pasado y el beneficio de la duda, lo tuve todo, los besos mas sinceros, las caricias mas inocentes existentes, yo te he tenido de las formas mas hermosas, profundas, puras y dichosas, pero siempre con el miedo intruso posándose entre las sabanas.
Yo no sé si te perdí definitivamente, pero es ahora, cuando pruebo el trago mas amargo de nuestro amor el momento en el que entiendo, que cuando mas te abrías a mí, sin desearlo te alejaba para nunca saborear una traición que me rompiera el corazón, lo mas ridículo de todo es que me lo estoy rompiendo sola.
Yo no te estoy pidiendo que vuelvas en este momento, te estoy pidiendo que me perdones tanta cobardía y me permitas en algún momento darte toda esta agonía para que la desechemos y solamente vivamos el momento; yo no quiero darte inviernos, yo quiero que me entiendas que siempre has sido ese instante perfecto, que muchos buscan, pero que yo obtuve entregando mi silencio.
Te perdono tus errores, tus enojos y acepto tus manías, porque aunque muchas veces te critiqué, he comprendido que conocí todo eso, porque en realidad he sido una de las partes más importantes de tu vida.
Yo te adoro y mas que adorarte te comprendo, te valoro, te admiro y te respeto; no te quiero perder, es por eso que deseo darte lo mejor de mi para que nunca te marches de nuevo, siempre te decía que seguramente nos pasaría lo mismo que a mis padres e ignoré por completo cuando suavemente me decías que lo nuestro era diferente y podía ser perpetuo.
Perdóname, porque fallé, porque dudé, porque he debido sonreír más, he debido regalarte mas de esta voz que te enamoraba, porque he debido abrazarte el doble, porque debí hacer menos preguntas y multiplicarnos respuestas que reafirmaran entendimiento, serenidad y futuro, porque he debido decirte lo mucho que disfruto tu olor, lo mucho que me gusta tu cabello, lo hermoso de tu sonrisa y lo admirable que es mirar como intentas progresar en la vida.
Vuelve, si lo deseas, en algún momento vuelve…

Porque fui torpe y te juro que quiero vivirte, no quiero perderte… y por fin lo entendí.