Los pasillos se llenan de amantes modernos,
con todos sus mensajes de texto, con sus besos exhibicionistas,
los pasillos se llenan de amantes modernos,
con sus ganas de nada mas que de provocar emociones dolorosas,
con su intelecto arraigado entre las piernas,
con su su su, su aburrida nada
los amantes a la antigua, conocemos el silencio,
navegamos por océanos que nos enrumban directamente al infierno,
los amantes a la antigua comemos, tragamos y bebemos sueños,
buscamos la fórmula exacta para combatir el entorpecimiento,
los amantes a la antigua sabemos de siniestros,
buscamos amores verdaderos, no nos basta un amor de medio tiempo.
con todos sus mensajes de texto, con sus besos exhibicionistas,
los pasillos se llenan de amantes modernos,
con sus ganas de nada mas que de provocar emociones dolorosas,
con su intelecto arraigado entre las piernas,
con su su su, su aburrida nada
los amantes a la antigua, conocemos el silencio,
navegamos por océanos que nos enrumban directamente al infierno,
los amantes a la antigua comemos, tragamos y bebemos sueños,
buscamos la fórmula exacta para combatir el entorpecimiento,
los amantes a la antigua sabemos de siniestros,
buscamos amores verdaderos, no nos basta un amor de medio tiempo.
2 comentarios:
Me ha gustado mucho tu poema, los modernos, los antiguos, cuanta diferencia entre amores, se queda uno siempre añorando, lo más puro, sublime,los tiempos modernos parecen hacer al amor más accesible, cuando verdaderamente se hace menos amor...
Un placer visitarte.
Genial; primera vez que leo un poema que diferencie las formas de amar; tiempo pasado y el efímero tiempo presente.
Por supuesto que comparto el de otros tiempos, el amor romántico, el que se saboreaba más sutilmente, sin apuros, sorbiendo cada trago de entrega.
Maravilloso. Felicitaciones Ellen.
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