domingo, 17 de julio de 2011

I was made for you




Be my friend, hold me
Wrap me up, un-fold me
I am small, and needy
Warm me up, and breathe me.
Sia.

Sabes, yo he aprendido con los años que las personas se van y que a veces yo busco que se vayan antes de tiempo, porque es mejor ahorrarse la tristeza del futuro, los tormentos.

Sabes, jamás olvidaré que cuando me caí, tú me sujetaste con toda tu fuerza y me ayudaste a levantarme, yo jamás lo olvidaré.

Sabes, es complejo, yo no quiero que te vayas, pero no tengo motivos para pedirte que te quedes junto a mí, no puedo prometerte eternidad cuando no la conozco, no pierdas el tiempo con quien a fin de cuentas parece no ser conveniente al día siguiente, al mes siguiente, al año siguiente.

Sabes, yo me sentí amada, amada por muchas personas, pero a ti en realidad te creí, a ti verdaderamente te sentí y me duele perderte, pero con los años también entendí que casi todo tiene un fin.

Sabes, estoy lista, perfumada, con los ojos cristalizados, esperando una llamada que no llegará, aguardando y Dios sabe que si de algo me he cansado en la vida es de esperar.

Sabes, yo ya he perdido, yo ya escuché muchas veces palabras como las tuyas, eso de que no me abandonarían, eso de que todo mejoraría, eso de que yo era maravillosa, eso de que era irremplazable, eso de que al día siguiente iba a escuchar la misma voz por las mañanas, eso de que volvería a ilusionarme, eso, eso que repetiste una y otra vez.

Sabes, es mejor que no regreses, porque yo no soy buena diciendo adiós, porque subestimarme no le luce a nadie, ni siquiera a ti, es mejor que no regreses porque al parecer yo no sé hacerte feliz, yo no tenía mucho, yo no estaba preparada, pero yo te entregué lo mejor de mí.

Vete con tu olor a coco, con tu Caribe, con tu sonrisa, con tu nobleza, con tu verdad, con tu mentira, con todo ese amor que me tienes, con tus enojos, con tu gente, con tu poca credibilidad, mejor vete porque me hiciste tanto bien que de pronto sabía que nos íbamos a lastimar.

Vete con tu verde, con tu color miel, con tu suavidad, con tu intensidad, con tu serenidad, con tu manual de “1001 formas distintas para cuidarte de mí”, vete que estoy segura que tu talento para huir no nos encontrará otra vez.

Vete, porque por más que te diga que me duele tu ausencia tú preferirás no creerme, porque por más que necesites mi risa, mi seriedad y mi sabor a capital, tú prefieres tropezar.


Fotografía: Carolina Jiménez.

.

sábado, 16 de julio de 2011

No hagas mucho ruido.

Oh, you’re in my veins
And I cannot get you out.
Oh, you’re all I taste,
At night inside of my mouth.
Oh, you run away,
Cause I am not what you found.
Oh, you’re in my veins
And I cannot get you out.

................ Andrew Belle



Desperté con la terrible emoción de encontrarme contigo, nuestro único testigo como siempre el destino, yo te conozco de antes, y reaccioné exactamente como aquel día en el que te conocí, como aquel día.

Me conoces, en tu espera acomodé mi cabello incontables veces, estudié mi postura, mi emoción y controlé mis ganas de sujetarte eternamente, me conoces mi amor, a como nadie jamás lo logrará, me conoces tanto que en mi despiste tu sonrisa me volvió a impactar.

La vida da tantas vueltas y yo quisiera que se detenga ya, que te regrese a mí y que me logres alcanzar, que se detenga y que en su última vuelta me mires fijamente a los ojos y me convenzas
de que es hora de volver a casa, de que el sufrimiento, los terceros y la distancia ya no son fuertes, no como nuestras ansias.

La vida transcurre y no hemos dejado de vivirla, pero algo falta, tú sabes que falta mi aroma, yo sé que falta la suavidad de tu cabello, tú sabes que falta mi paciencia, yo sé que falta tu insolente
impuntualidad, pero no hagas mucho ruido, yo prefiero callar.

No ha dejado de ser difícil, he conocido de distintas formas la felicidad, pero me faltas en las noches para ver televisión y hablar, es irónico de mi parte, llegué a reprocharte tanto nuestra tranquila actividad y ahora solamente deseo en una tarde lluviosa tomar el café contigo y bromear, tanta fiesta no me ha dejado más que ambigüedad, mala reputación y aparentar.

Yo no conozco el futuro, lo planeamos tanto, parecíamos tenerlo tan asegurado y no hizo más que traicionarnos, no logró más que separarnos e impregnar en nuestros pechos un quebranto abstracto, pero no hagas mucho ruido, al menos ya no hay llanto.

Al menos ya no lloras desesperadamente ante mi indiferencia, al menos ya no sufro esos enojos causados por la impotencia, al menos hoy sonreímos, al menos cariño aunque no eres tú quien me ve despertar y no soy yo quien te ve andar, sabemos de igual forma que es imposible dejarnos de adorar. Porque por un momento volvimos a casa y que hermoso fue regresar, pero no hagas mucho ruido, no tenemos talento para lastimar. Tiempo al tiempo, que de pronto la vida nos alcanzará. Tiempo al tiempo, que la vida de pronto nos va a despertar.


.