Es jueves por la tarde, estoy atascada en el trabajo y era momento de escribir, de escribirte. Vengo de la casa de Rup, antes di un paseo por el jardín de Waltz creo que viven en el mismo sitio o en la misma cama de sueños y me huele todo a serenidad…
Tengo algo entre la garganta y el pecho, creo que te extraño y no me refiero a que te veré hoy por la tarde en un café, me refiero cariño a que extraño ese resultado explosivo de tu piel desnuda sobre estas manos que sobre ti son suaves y puras, yo extraño indudablemente cuando puedes verme fijamente a los ojos en la oscuridad y cuando disfrutas entre risas mi sensación final, la finalidad de mis finalidades.
Te extraño, socialmente no es admitido pero quisiera que importara menos, lo finjo pero siempre es relevante tu familia, la mía y los insoportables transeúntes.
Debes estar duchándote mientras yo me poso sobre este escritorio a pensarte tan susceptible al frío invierno que se aproxima, creo que estoy siendo hasta incoherente pero te extraño tanto que se me desgarran todos los días las palmas de las manos añorando sujetarte al dormir, sé que lo recuerdas tanto como yo pero no quieres desesperar, te entiendo y me entiendes.
El tiempo esta pasando, esta pasando contigo y aun así puedes sostenerlo delicadamente sobre mis labios, no me aburre, me emociona y hasta lloro antes de dormir porque sé que estas aquí y allí, sé plenamente que estás junto a mi, no en la misma cama ni en el mismo apartado postal, pero estás conmigo todas las madrugadas mientras intento descansar y en cada mañana cuando intento despertar y despierto, soñolienta y agotada pero sé que nos espera un día mas, nos espera esta incansable eternidad.
Con eso basta para sonreírle a las paredes que se preparan para algún día mirarte llegar.
Tengo algo entre la garganta y el pecho, creo que te extraño y no me refiero a que te veré hoy por la tarde en un café, me refiero cariño a que extraño ese resultado explosivo de tu piel desnuda sobre estas manos que sobre ti son suaves y puras, yo extraño indudablemente cuando puedes verme fijamente a los ojos en la oscuridad y cuando disfrutas entre risas mi sensación final, la finalidad de mis finalidades.
Te extraño, socialmente no es admitido pero quisiera que importara menos, lo finjo pero siempre es relevante tu familia, la mía y los insoportables transeúntes.
Debes estar duchándote mientras yo me poso sobre este escritorio a pensarte tan susceptible al frío invierno que se aproxima, creo que estoy siendo hasta incoherente pero te extraño tanto que se me desgarran todos los días las palmas de las manos añorando sujetarte al dormir, sé que lo recuerdas tanto como yo pero no quieres desesperar, te entiendo y me entiendes.
El tiempo esta pasando, esta pasando contigo y aun así puedes sostenerlo delicadamente sobre mis labios, no me aburre, me emociona y hasta lloro antes de dormir porque sé que estas aquí y allí, sé plenamente que estás junto a mi, no en la misma cama ni en el mismo apartado postal, pero estás conmigo todas las madrugadas mientras intento descansar y en cada mañana cuando intento despertar y despierto, soñolienta y agotada pero sé que nos espera un día mas, nos espera esta incansable eternidad.
Con eso basta para sonreírle a las paredes que se preparan para algún día mirarte llegar.
2 comentarios:
Waltz...reportándose...que bella tú al visitarme, al visitar a Rup..lo más seguro que sea yo buscando vivir donde ella vive. Es bello todo lo que dices, es hermoso, suave, tierno...como caricias, vos sos como caricias en el aire.
Que bello, tiene razón el anónimo.
Que suerte ser el poseedor de esos deseos y sentimientos.
Que bella es la vida a veces.
Mucha suerte.
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